Gratitud

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La mayoría de las personas trabajan en una empresa de maniquís. ¡Sí, así es! y te puede estar pasando. No importa si estas en un banco, una fábrica o en una compañía de tecnología, puedes estar trabajando en una empresa de maniquís.

Ya sabrás que un maniquí es una figura con forma humana que sirve para exhibir prendas de vestir. Lastimosamente, muchas veces los equipos de trabajo no trascienden más allá de reconocer cómo van vestidos sus compañeros de trabajo y desperdiciamos por completo la capacidad de cohesionar a un nivel más humano, más trascendental podríamos llamarlo.

Te invito a que veas el siguiente video:

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¿Cómo un maniquí puede generar tanto impacto? Simplemente porque lo hacemos visible a través de nuestro reconocimiento. Reconocer es dar visibilidad a lo invisible. Celebrarlo de forma colectiva, que es distinto a celebrarlo individualmente. Cada uno de nosotros tiene la posibilidad de reconocer y celebrar los éxitos con las personas cercanas en nuestros equipos, y esto es muy gratificante y necesario, porque despierta y genera un compromiso entre todos, nos impulsa a remar para el mismo lado.

Sabiendo los beneficios que aporta la cultura del agradecimiento en nuestras vidas personales y laborales, te invitamos a que puedas implementar el siguiente ejercicio esta semana con tu equipo:

LOS MANIQUIS COBRAN VIDA:

Pídele a tu equipo que piensen en los diferentes integrantes del equipo y que recuerden algún gesto amable que alguien haya tenido con él/ella. Pueden ser varios gestos y varias personas, lo importante es hacerlo consciente. Cítalos y diles que deben traer preparada la actividad, compárteles el video de este correo y sobre esto genera las siguientes conversaciones:

¿Qué reflexión nos deja el video?
¿Les ha pasado que a veces no nos damos cuenta, qué hacen nuestros compañeros por nosotros?
¿En quién han pensado para reconocer el día de hoy? – Deja que todos compartan
Agradece el espacio y tú como líder también genera vida con tu reconocimiento a las personas que consideres.
Establecer una cultura de agradecimiento incentivará al grupo a participar en ella. Como siempre decimos:

El agradecimiento es la semilla de la abundancia.

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