Hoy queremos hablarte del beneficio que tiene para las empresas la aplicación de metodologías y procesos definidos en sus colaboradores.
La primera persona acabo más rápido a pesar de no tener una herramienta de última tecnología. ¿Por qué se dió este resultado?
Claramente tenía un método. Un método es un modo de realizar algo de forma sistemática, organizada y/o estructurada. La palabra viene del latín methodus, que a su vez, tiene su origen en el griego, en las palabras meta = meta y hodós = camino, Por consiguiente, método quiere decir camino para llegar a un lugar determinado, camino que se recorre.
Cuando se tiene un método, se puede diseñar, medir y mejorar. Los métodos son muy importantes en el proceso de planificación, diseño, evaluación y sistematización para tener procesos ordenados y coherentes, que tengan una secuencia lógica y que den por resultados una transformación de la situación de la cual se partió.
Una alta tecnología sin método puede ser un completo fracaso o en el mejor de los casos ineficiente para el costo invertido. Pero ambas combinadas, dan un salto cuántico a la productividad de las personas.
Te invitamos a que realices el siguiente ejercicio con tu equipo:
1 - Muestrales el video. 2 - Realiza una reflexión acerca del video: ¿Por qué se da ese resultado? 3 - Interioriza esa reflexión en algún proceso del equipo: ¿ En qué proceso nos está faltando una metodología? 4 - ¿Qué métodos existen o podemos construir para cerrar la brecha en el proceso que hemos encontrado sin metodología? 5 - ¿Quién se encarga de diseñar y afinar ese método en ese proceso? ¿Cuándo lo probamos?
Nuestra labor como líderes es lograr hacer conciencia de cómo mejorar y tener un método, es una de las mejores formas de hacerlo.
Hasta que lo inconsciente no se haga consciente, el subconsciente seguirá dirigiendo las acciones de tu equipo y ante la improductividad siempre dirán: “Es que así siempre se ha hecho”