Seamos honestos, ¿Quién no desea ser reconocido por su trabajo?
Maslow lo planteo muy bien en su obra de 1943 “Una teoría sobre la motivación humana”, donde después de suplir las necesidades más básicas (fisiológicas, de seguridad y afecto), los seres humanos necesitamos satisfacer necesidades más elevadas, hasta llegar a la auto realización.
¿Pero cuántos compañeros o líderes consideran el apreciar a otros como parte fundamental de su trabajo?
Por el contrario, les es más fácil ver lo negativo y recalcarlo en cada reunión, que reconocer abiertamente las cosas que las personas han hecho bien.
Definitivamente, nos cuesta reconocer.
Cómo usar un reconocimiento eficaz.
El reconocimiento requiere un esfuerzo adicional en las personas, no es natural, no viene en nuestro ADN, mucho menos en el mundo corporativo tan competitivo. Pero: ¿Cuánto crees que ganaría el clima laboral de tu equipo si se reconocieran entre ellos las cosas que hacen bien? ¿Crees que impactaría en su motivación para trabajar?
Por mi experiencia, el reconocimiento cojea por tres factores:
1 - La ceguera de ver las cosas positivas de los demás. 2 - La incapacidad para verbalizarlo. 3 - Una cultura organizacional que no genera los espacios para hacerlo.
Implantar una cultura de Reconocimiento tiene grandes beneficios.
En diferentes proyectos de reconocimiento que hemos implementado, nos damos cuenta como a través del reconocimiento los colaboradores pueden reflejar los valores y los comportamientos que las compañías desean promover en ellos. Una persona reconocida está más dispuesta a repetir el comportamiento por el cual fue reconocido y la repetición lo lleva a convertirlo en hábito.
Las personas que observan a otras ser reconocidas, tendrán una ruta clara de que deben hacer para ganarse ese reconocimiento, generando el deseo de comportarse adecuadamente y pertenecer de esta manera al grupo de personas que reconocen.
No debes asociar los reconocimientos a recompensas económicas. Particularmente no te lo recomiendo, te ayudamos a explorar diferentes recompensas no salariales que generen recordación, agrado, satisfacción, emoción, orgullo, al momento de recibirlas.
Nos estamos moviendo en escenarios empresariales cada vez más exigentes, tenemos que aumentar nuestra sensibilidad hacia el entorno personal de nuestros colaboradores.
Las organizaciones que no utilicen estratégicamente el reconocimiento renuncian a atraer nuevos talentos, desmotivan al que ya tienen, pierden una oportunidad de fortalecer la motivación y el compromiso humano y profesional de sus colaboradores.
Para saber más te invitamos a que conozcas nuestro programa reconocimiento, servicio fundamental de Evolución.