La gamificación es una metodología que busca trasladar los componentes y las mecánicas de los juegos a contextos que no sean juegos, con el objetivo de motivar ciertos comportamientos.
Observemos los siguientes componentes de este juego:
Ahora te compartimos algunas ideas para aterrizarlo con tu fuerza de ventas:
Primero: Define el objetivo principal:
Podríamos definir para este ejemplo la cuota de ventas. Propongamos que el juego durará todo el año, lo mediremos trimestralmente y al final nos importa llegar al resultado acumulado al 31 de diciembre.
Segundo: Define objetivos secundarios:
Podríamos definir para este ejemplo actividades que nos llevarán a conseguir el objetivo principal: contactar nuevos clientes, venta cruzada sobre clientes antiguos, fortalecimiento de competencias comerciales, son las que utilizaremos para nuestro ejemplo.
Tercero: Definamos los componentes:
Para este ejemplo utilizaremos 3: Puntajes, Progresión, Grafico Social
Puntajes: Debemos definir los puntos por los objetivos a cumplir. La estrategia aquí es que exista una mayor diferencia por el objetivo principal y que los secundarios sean iguales o tengan una ligera superioridad entre sí, te recomiendo que no sea superior al 20% puesto que desmotivarías a que la fuerza comercial trabaje por las otras categorías:
• Lograr la cuota del trimestre: + 200 • Contactar un nuevo cliente + 100 • Vender algo sobre un cliente antiguo + 90 • Formarse en competencias comerciales + 80
Progresión: Es la forma de retroalimentar al vendedor y aquí es donde el líder juega un papel importantísimo. En un juego la progresión se da normalmente en la figura de una barra de porcentaje, la cual va avanzando en la medida que el jugador va avanzando. En esta estrategia, la idea es que se le enseñe al comercial en que % va pero tenga una conversación con su líder que lo invite a movilizarse. Esta conversación debe ser una vez al mes, donde abordarán cada uno de los objetivos propuestos, identificarán las barreras y tendrán compromisos para avanzar.
Grafico Social: Es la forma de mostrar quienes están en el juego. En nuestro caso, seria poder enseñar el ranking de resultados, sin embargo no te aconsejo que lo manejes de la manera convencional (nombre y puntaje) por que puedes lograr el efecto contrario: Desmotivar al que no va bien. Para esto, te invito a que construyas un tablero con el rostro de las personas, sin ranking y a su lado frases alusivas a la motivación que cada uno tiene para alcanzar los resultados. Estas frases pueden ir variando cada trimestre.
La mejor comparación que puede dar este proyecto es consigo mismo, de esta manera la persona sentirá realmente posibilidades y que va avanzando, aumentando su motivación.
Cuarto: Define recompensas.
Puedes construir recompensas por el objetivo principal, por cada uno de los objetivos secundarios, por haber superado cierta cantidad de puntos, entre otras. Las recompensas no necesariamente deben ser grandes sumas económicas, puedes trabajar muchas recompensas sobre el salario emocional, aquí algunas ideas:
• Un reconocimiento por parte de la gerencia regional, después por la general. • Tiempo libre. • Un desayuno en la oficina. • Una carta de reconocimiento dirigida a la familia del colaborador.
Claramente estos componentes son una idea de lo que puedes hacer, sin embargo ponerlo a andar de manera armónica y constante en el tiempo requiere la estructuración de un proyecto, con sus diferentes etapas, en el que debemos entender cómo cada componente juega un papel trascendental a través del tiempo para motivar constantemente los comportamientos que se desean reforzar.
Te compartimos nuestro lienzo, con el cual iniciamos a aterrizar las diferentes piezas de un proyecto GAMIFICADO:
Un abrazo y cuenta con nosotros para aterrizar cualquier idea gamificada en tu empresa.